El mes de diciembre es sinónimo de familia, amigos, fiestas y muchos atracones de comida. Los excesos de la Navidad se presentan en forma de kilos de más. Estos suelen acumularse en las zonas más visibles de nuestro cuerpo.
Con la llegada de enero y de los nuevos propósitos para año nuevo, también llega el impulso de buscar un estilo de vida más saludable que permita deshacerse de esos kilos de más.
Cómo eliminar los excesos de la Navidad de forma rápida y segura
1.Agua
La ingesta diaria de al menos 2 litros de agua al día es una de las medidas que se deben poner en práctica para bajar de peso y al mismo tiempo evitar retener líquidos.
En este sentido, también es recomendable eliminar de la dieta o, en su defecto, reducir al mínimo el consumo de bebidas gaseosas y azucaradas, incluyendo aquellas que son aparentemente ligeras y sin calorías.
2.Ejercitarse
El ejercicio es clave para perder peso y luego para mantenerlo. Además, su práctica regular trae otros beneficios al organismo como el control del estrés, mejoras en el estado de ánimo y prevención de enfermedades.
Si el objetivo es hacer ejercicio para perder peso, lo recomendable es hacer un mínimo de 45 minutos de actividad física 4 o 5 veces a la semana.
Algunas actividades como caminar, montar en bicicleta, nadar o hacer la elíptica, son muy recomendadas para este objetivo de perder peso.
3.Evitar el picoteo
Los excesos de la Navidad vienen, en gran parte, por el constante picoteo entre comidas. Este mal hábito debe acabarse si se busca perder peso. En su lugar se debe optar por comidas más completas, nutricionalmente hablando.
En caso de querer comer entre comidas para saciar la ansiedad y el hambre, lo recomendable es optar por opciones naturales como un puñado de frutos secos, yogurt ligero o simplemente una fruta. Eso sí, siempre sin abusar.
4.Comer de forma más saludable
Si bien los tips anteriores son claves para perder peso, la alimentación es la base primordial para alcanzar dicho objetivo. Es decir, de nada sirve ejercitarse una hora diaria si no se cambian los hábitos alimenticios.
En este aspecto, es primordial incorporar verduras frescas a por lo menos dos comidas diarias. De igual forma, nunca debe faltar la proteína, especialmente carnes como el pollo y pescado hechos a la plancha o al horno.
En una de las comidas, especialmente al mediodía, se puede incorporar una porción pequeña de arroz sin colorante o unas patatas al vapor sin mantequilla y poco aceite, entre otras opciones saludables. También es importante eliminar de la dieta frituras y postres con gran cantidad de azúcares.
5.Paciencia
La paciencia es otro punto fundamental. Para ello es importante plantearse objetivos realistas y no esperar adelgazar cinco kilos en una o dos semanas.
Si bien es cierto que existen dietas milagrosas y en exceso restrictivas que prometen grandes cambios en poco tiempo, también es cierto que dichas dietas ponen en riesgo la salud de las personas y tienden a dañar el metabolismo. Además, el efecto rebote de las mismas es muy alto.
Con un poco de paciencia es posible hacer frente a los excesos de la Navidad. Cambiar los hábitos no es nada fácil, pero con un poco de creatividad y voluntad es factible alcanzar todos los objetivos propuestos.